Una travesía es un tramo de carretera que atraviesa un poblado o municipio. Según la DGT, se define como un tramo de carretera convencional que se encuentra dentro de un poblado. En una travesía, se combinan características de una carretera interurbana y una vía urbana. Cuenta con edificaciones en ambos márgenes y un entramado de calles conectadas. Las normas de circulación en una travesía son principalmente las de circulación urbana, con un límite de velocidad de 50 km/h que puede ser reducido en tramos peligrosos. Además, existen regulaciones específicas para vehículos de transporte de mercancías peligrosas y se deben encender las luces al estacionar o detenerse en condiciones de baja visibilidad. Es importante tener en cuenta que los vehículos de movilidad personal no están permitidos en travesías. La titularidad de las travesías puede depender del Ministerio de Transportes o los gobiernos regionales.
Principales puntos clave:
- Una travesía es un tramo de carretera que atraviesa un pueblo o municipio.
- Combina características de una carretera interurbana y una vía urbana.
- Las normas de circulación son principalmente urbanas, con un límite de velocidad de 50 km/h.
- Los vehículos de transporte de mercancías peligrosas tienen un límite de velocidad de 40 km/h.
- Las luces deben encenderse al estacionar o detenerse en condiciones de baja visibilidad.
Características y diferencias entre una travesía y una vía urbana
Una travesía y una vía urbana son dos conceptos que se refieren a tipos distintos de vías dentro de un poblado o municipio. Aunque comparten algunas características, también presentan diferencias importantes.
Una travesía se define como un tramo de carretera convencional que atraviesa un pueblo o municipio. En este tipo de vía, se combinan elementos de una carretera interurbana y una vía urbana. Por un lado, encontramos edificaciones en ambos márgenes y un entramado de calles conectadas. Por otro lado, se permite la circulación de camiones y se utiliza para conectar localidades. En una travesía, además de las normas de circulación urbana, también se deben cumplir regulaciones propias de las carreteras interurbanas.
Por otro lado, una vía urbana es una vía pública que se encuentra completamente dentro de un pueblo o ciudad y permite recorrer el área urbana. Puede ser una calle o una avenida. A diferencia de una travesía, una vía urbana no atraviesa un poblado, sino que se encuentra completamente dentro de él. En una vía urbana, se deben seguir las normas de circulación propias de los entornos urbanos.
Normas de circulación y regulaciones específicas en una travesía
Las travesías, al ser tramos de carretera que atraviesan poblados o municipios, tienen regulaciones específicas que deben ser respetadas por los conductores. Una de las normas más importantes es el límite de velocidad, el cual está establecido en 50 km/h para vehículos comunes y 40 km/h para vehículos de transporte de mercancías peligrosas. Es importante tener en cuenta que este límite puede ser reducido en tramos peligrosos o por decisión del ayuntamiento.
Al detenerse o estacionar en una travesía, es obligatorio dejar las luces encendidas en condiciones de baja visibilidad para alertar a otros conductores. Además, es importante recordar que los vehículos de movilidad personal no están permitidos en travesías ni en su arcén, por lo que se deben utilizar vías alternativas.
En una travesía, se deben seguir las normas de circulación urbana, como respetar los semáforos y ceder el paso a los peatones. Sin embargo, también se debe tener precaución por las características propias de una carretera interurbana, como adelantar con precaución a peatones y ciclistas. Es fundamental respetar el límite de velocidad y estar atentos a las señales de tráfico para garantizar la seguridad de todos los usuarios de la vía.
Reducción de accidentes y medidas de seguridad en travesías
Las travesías son tramos de carretera que pueden resultar peligrosos debido a los cambios de velocidad al ingresar a un poblado o municipio. Con el objetivo de mejorar la seguridad en estos tramos, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha implementado la “Estrategia T”, que incluye diversas medidas de seguridad.
Una de las medidas más destacadas es la mejora de la señalización en las travesías. Se están instalando nuevas señales, como los conocidos “dientes de dragón”, que alertan a los conductores sobre la entrada a una travesía y la necesidad de reducir la velocidad.
A pesar de estas medidas, los accidentes y fallecidos en travesías aún representan una preocupación. En el año 2021, se registraron 34 fallecidos en estos tramos, la mayoría de ellos peatones. Por ello, es fundamental seguir trabajando en la mejora de la seguridad en las travesías y concienciar a los conductores sobre la importancia de respetar las regulaciones específicas en este tipo de tramos.
La reducción de accidentes en las travesías es un objetivo prioritario para la DGT y las autoridades competentes. A través de la implementación de medidas de seguridad y la educación vial, se busca garantizar la protección de todos los usuarios de la vía y crear un entorno de circulación más seguro en los tramos que atraviesan poblados y municipios.